Invitación a
productores
agropecuarios

Cadena de Oración
pidiendo lluvias a
nuestra Patrona

“María Auxiliadora”

Organizado por la Comisión de Acción Social de la entidad ruralista del partido de JUNÍN se puso en marcha una cadena de Oración durante tres días seguidos, pidiendo con mucha fe, lluvias y alivio para nuestros cultivos a la Patrona del agro argentino.

Esta acción culminará el domingo 25 a las 20 horas, en la parroquia “Nuestra Señora del Carmen” con la Santa Misa donde se realizará el mismo pedido. La comisión de damas de la Sociedad Rural de Junín y la comisión directiva invitan a los productores agropecuarios en particular y a la comunidad en general a acompañar el humilde ruego en la misa del domingo.

Recordemos que con motivo de la entronización de la imagen de María Auxiliadora en la ermita construida especialmente el predio ferial de Ruta Nacional 7 y camino al parque natural Laguna de Gómez, en diciembre pasado, se distribuyeron estampas de María Auxiliadora y en el reverso, una oración “POR LAS URGENCIAS DEL AGRO. María Auxiliadora, Patrona del agro argentino, escucha nuestra oración e intercede por nosotros.

Tú conoces los sinsabores de nuestro trabajo, las penurias de debemos pasar desde que aramos hasta que llega la hora de la cosecha. Tú sabes que las condiciones climáticas muchas veces son desfavorables y que no siempre las leyes del mercado son justas con nosotros. Tú comprendes que hay muchas circunstancias que inquietan nuestros corazones y nos hacen olvidar, que quien alimenta a los pájaros del cielo y viste a las flores silvestres es nuestro Padre Dios, que siempre desea nuestro bienestar y dicha.

Enséñanos a confiar en ese Dios amoroso que nos reveló tu Hijo, que hace salir el sol gratuitamente cada día y envía la lluvia sobre los campos de justos y pecadores. Ayúdanos a sentirnos ante Él como niños pequeños en brazos de su madre cariñosa. Aparta de nosotros toda superstición y la falsa creencia de pretender controlar a Dios y a la naturaleza con oraciones mágicas.

Que recemos sabiendo que todo depende de Dios; pero que, paralelamente, trabajemos con la constancia y la honradez que corresponde a los hijos a quienes Dios instituyó como administradores de todo lo creado y a quienes confió el cuidado de la obra en sus manos. Finalmente, dulce Madre nuestra, ayúdanos a descubrir a nuestros hermanos necesitados, a tus hijos predilectos y a convertirnos en colaboradores tuyos a favor de quienes invocan tu auxilio. Amén”.