El precio de la carne vacuna vs. los beneficios del cerdo (y la campaña de Cristina recorrió el mundo)

El Plan del gobierno de incentivar el consumo doméstico de carne porcina debido a las subas de hasta un 40% de la carne vacuna, se fue de las manos.

Ya hay quienes consideran que como la estrategia del secretario de Comercio Interior, Guillermo Moreno, de pisar los permisos de exportación de carnes para que no aumente no dio el resultado esperado (la carne vacuna subió un 40%) la estrategia del gobierno fue presentar un plan para aumentar el consumo de cerdo como opción al tradicional alimento nacional.

De allí que la Presidente, Cristina de Kirchner, quiso hacer declaraciones de impacto mediáticp, sin embargo, a todas luces 'se le fue la mano'. Es que si bien la improvisación es regla en el universo kirchnerista, no es uno de los fuertes de la jefa de estado quien tiene una habilidad envidiable para memorizar largos textos, sin embargo el doble sentido y el sentido de la ubicación, claramente, no son lo suyo.

El resultado: las desafortunadas declaraciones rompiendo con cualquier sentido el buen gusto y envestidura que recorrieron el mundo.

Para avalar esta teoría, el vicepresidente de la Asociación de Propietarios de Carnicerías de Capital Federal, Alberto Williams, confirmó hoy (28/01) que el precio de la carne vacuna aumentó un 40 % desde diciembre último.

Además, consideró positivo que el gobierno nacional promueva la cría de cerdo, aunque sostuvo que este tipo de carne "no se puede implantar" en el mercado por ser "cara" y escasa.

El objetivo apunta a incentivar el consumo doméstico de carne porcina dadas las evidentes ventajas que están presentes en la ingesta cotidiana de la población.

Para que esto sea posible es necesario incrementar los rodeos de ganado porcino, que a su vez permitan abastecer adecuadamente el mercado.

En ese sentido, es imprescindible que los precios de los cortes populares de carne porcina estén directamente relacionados con el poder adquisitivo de la población de manera que puedan competir con la carne vacuna y ser así una opción más a la hora de elegir algunas de estas carnes.

En ese sentido, el Gobierno y la Asociación Argentina de Productores de Porcinos (AAPP) firmaron ayer en la Casa de Gobierno un nuevo acuerdo de precios para la carne de cerdo al mostrador.

El convenio, el tercero de este tipo que suscriben los productores con la Casa Rosada desde 2006, establece precios bajos para ocho cortes de cerdo, entre los que se incluyen tres cortes de pulpas (pata trasera, pata de paleta y corte milanesa) y cinco cortes de entrevísceras.

Los valores al consumidor establecidos por el convenio son: para la pata de jamón, $ 8,89 el kg; para la pata de paleta, $ 7,60 el kg; para el corte de milanesa; $ 12,95 el kg; para patitas y manos, $ 2,60 el kg; para rabo y anaqueta, $ 3,30 el kg; para la cabeza, $ 2 el kg; para el hígado, $ 3,45 el kg, y para el riñón, 2 pesos por kilo.

A cambio, el Gobierno, a través de la Oficina Nacional de Control Comercial Agropecuario (Oncca), renovó las compensaciones al maíz para el sector porcino hasta el 31 de julio.

Según explicaron desde el Gobierno, la compensación abonada será equivalente a la diferencia que haya entre el precio de compra de maíz abonado por el productor y el precio de abastecimiento interno de este.

Rápidamente, las declaraciones subidas de tono impactaron en la prensa internacional. "Es mucho más gratificante comerse un cerdito a la parrilla que tomar Viagra", exclamó la mandataria mientras comunicaba un convenio agropecuario.