El girasol pide cero

Retenciones a la

exportación de

aceite

ASAGIR solicitó llevar a cero los Derechos de Exportación del aceite y a 3% como máximo los de la semilla. La cadena pide medidas urgentes ante la crítica situación que atraviesa el cultivo.

El presidente de la Asociación Argentina de Girasol (ASAGIR), Ricardo Negri, participó hoy, junto a representantes de las demás cadenas de valor por producto del país, de la reunión llevada a cabo en el recinto de la Cámara de Diputados de la Nación con el fin de tratar el tema retenciones.

La Asociación Argentina de Girasol (ASAGIR), entidad pionera en la representación de cadenas de valor por cultivo, solicitó llevar los Derechos de Exportación de la semilla a un 3% como máximo y a cero los del aceite y subproductos.

La propuesta contempla la posibilidad de hacerlo gradualmente al cabo de 3 años, debido a la urgencia que requiere la medida ante la situación crítica que atraviesa el cultivo. Esto implica la reducción inmediata de 17 puntos para posibilitar la siembra de la campaña en curso y 6 puntos en cada uno de las siguientes. Esa reducción impactaría en apenas el 0,15 % en la recaudación total del 2011.

Impacto fiscal de la reducción en girasol
Para la campaña 2010/11 se estima un área girasolera de Mha 1,5 con una producción de Mt 2,6 que significa un rinde de 1733 kg/ha, teniendo en cuenta un año con pronóstico de Niña (sequía).

Con este panorama, las exportaciones totales de aceite y harina serían, el año que viene, a valor FOB de hoy, de MU$S 827 y el Estado recaudaría MU$S 248. Al bajar las Retenciones a 13% (para aceite y harina), recaudaría MU$S 99 y a 6% recaudaría MU$S 50. Pero esta reducción de la recaudación se vería compensada con un aumento en la del impuesto a las ganancias. Además, el estudio hecho sobre el valor agregado de la cadena del girasol indica que no sólo se aumentaría el impuesto a las ganancias, lo cierto es que ante el aumento previsible del área sembrada y de la producción, ese valor agregado quedaría fundamentalmente en las áreas donde se siembra girasol.

Para estimar los recursos tributarios totales para 2011, ASAGIR anualizó hasta julio 2010 y usó este número de MU$S 98.800 como recaudación estimada de 2011. Bajo este marco de análisis, la participación del complejo girasol sería de 0,25%; 0,10% y 0,05% para retenciones de 30; 13 y 6%, respectivamente. “Como se ve, un sacrificio fiscal insignificante”, argumentó la entidad que nuclea a la cadena de valor del girasol.

El objetivo de esta propuesta es devolverle competitividad a las economías regionales vinculadas a buena parte del girasol sembrado en zonas marginales del país. Además, recuperar la competitividad perdida a nivel mundial como proveedor de aceite de girasol a raíz de un fuerte desbalance con sus principales competidores: Ucrania (con 12% de retenciones para el grano y 0 % para aceite y pellets) y Rusia (con 20% de retenciones para el grano y 0 % para aceite y pellets), contra 32% de retenciones en grano que tiene la Argentina, 30 % en aceite y pellets. Esto, sin tener en cuenta que además, la Unión Europea, con un 19,5% de la producción global, subsidia a sus productores.

Panorama del cultivo
¿Qué pasa con el girasol en la Argentina? ¿Por qué el girasol es discriminado cuando se discuten las Retenciones?

Se destacó que quienes toman decisiones en los ámbitos de Gobierno deben tener presente que por la pérdida de competitividad a partir del incremento de las retenciones, el girasol ha comenzado a perder sensible espacio en la agricultura argentina. En las últimas 2 campañas la producción cayó el 54 %, no sólo por razones climáticas.

A su vez, también deben tener en cuenta que en muchas regiones del país es la única opción agrícola, el elemento clave que mantiene la sustentabilidad de la explotación y el motor de la economía regional. Esto ocurre en diversas áreas de 4 provincias argentinas. Es el caso del Chaco, San Luis, La Pampa y vastas regiones de Buenos Aires.

Además, toda la cadena e incluso el Estado han invertido mucho dinero durante la última década para que la tecnología en girasol de la Argentina sea una de las más avanzadas del mundo. Sólo en los últimos 3 años ASAGIR - ANPCyT invirtieron más de 1,5 M de pesos en investigación.

Por último, desde la cadena recordaron que el girasol es mayoritariamente cultivado en zonas de ambientes con fuertes condicionantes donde la expectativa de rendimiento difícilmente supere los 1600 kg y el productor no tiene mayores alternativas.

El girasol es un producto del cual la Argentina es uno de los cuatro grandes productores mundiales, fue segundo exportador de aceite y es hoy líder en Ciencia y Tecnología en el mundo.

En razón de su rusticidad y adaptación a diversidad de ambientes, su cultivo es sembrado en áreas donde el suelo y/o el clima condicionan severamente la productividad, donde otros tiene más limitada aún la posibilidad de desarrollar y crecer, donde el girasol se constituye en una de las pocas opciones disponibles. El sudoeste, sudeste y oeste de Buenos Aires, junto con el norte de La Pampa concentran el 70% de la superficie sembrada de girasol.

Allí el productor no puede aspirar a más de 14 - 15 quintales, menos aún en años de clima adverso, razón por la que el girasol debe tener un trato que haga posible su siembra y no debe ser considerado en términos similares a otros cultivos.
La actual coyuntura de precios internacionales de aceites no es mala.

La grave sequía en el Hemisferio Norte, y el continuo aumento de la demanda mundial de aceites tanto para consumo humano como para biodiesel, ayuda.