Friday, September 26, 2008

El campo vuelve a las rutas
y cierra filas con Binner,
mientras el Congreso
duerme la siesta

Por R.A.M.

En la apertura del congreso de Federación Agraria, Eduardo Buzzi ratificó que se viene un plan de lucha contra la actitud kirchnerista hacia el sector, criticó la falta de federalismo e, implícitamente, avaló la reforma tributaria del socialismo luego de los cambios introducidos para el inmobiliario rural santafecino.

CIUDAD DE BUENOS AIRES (Urgente24). La bronca con el gobierno de Cristina por la falta de respuestas a las necesidades de un sector que no atraviesa su mejor momento, fue denominador común entre todos los asistentes al congreso anual de la Federación Agraria Argentina que se realizó en Rosario, Santa Fe. Con mayor o menor dureza, todos planteaban la necesidad de ir hacia un plan de lucha.

Paro contra la (falta de) política agropecuaria del gobierno nacional y casi un aval para la reforma tributaria del "amigo" y gobernador santafecino Hermes Binner, fueron algunos de los lineamientos que planteó Eduardo Buzzi en el discurso con el que abrió el 96º Congreso Ordinario de Federación Agraria, cuyo lema es "Federalismo y políticas públicas por una agricultura con agricultores".

El mandatario provincial, que fue recibido como si fuera su casa luego de que aceptara morigerar el aumento al impuesto inmobiliario rural incluido en su proyecto impositivo, también le pegó a la gestión kirchnerista por el "federalismo invertido" y dijo que su gobierno está haciendo el máximo esfuerzo posible para asistir a los productores afectados por la sequía.

Sin embargo, todo indica que los más duros –como siempre, los autoconvocados, que fueron como invitados– deberán contener el ímpetu: la medida de fuerza que Federación Agraria propondrá a la mesa de enlace es un paro sin corte de ruta –pero sí con presencia a los costados de los caminos– por 72 horas y una marcha a Buenos Aires el tercer día. Le fecha posible: del 6 al 8 de octubre.

Cortar o no cortar rutas es un dilema que se resuelve hacia la primera opción por una cuestión sencilla: la intención de no generar antipatías en sectores urbanos que apoyaron al campo durante el conflicto contra la resolución 125. Estudian un paro "inteligente" y silencioso porque de otra manera "se taparía el conflicto de la inflación y el caso de las valijas de Antonini Wilson".
Mientras esto ocurre el Congreso de la Nación sigue su largo letargo.

En la Comisión de Agricultura que preside el ultrakirchnerista, Alberto Cantero, esta semana se aprobó la Creación del Programa nacional del Control del Psillido Asiático, con la presencia de autoridades y técnicos del Senasa, quienes informaron acerca del manejo Integrado de Plagas y Enfermedades del citrus.

Todavía Diputados (que hace un mes que no sesiona), no pudo tratar los temas que exigen las entidades agropecuarias. Solo hay dictámenes favorables para declarar zona de desastre y emergencia social, económica y agrícola por 180 días prorrogables a varios departamentos de las provincias de Entre Ríos y Santiago del Estero, además del proyecto que declara la emergencia económica para Córdoba, tras los incendios que azotaron la provincia mediterránea.
Sin embargo las iniciativas que reclaman los ruralistas, como la nueva ley de arrendamiento y de emergencia agropecuaria, y planes para la leche, la carne y las economías regionales, duermen en un cajón del escritorio de Cantero.

El fantasma de los '90
Lo que no es un dilema es si hay que protestar o no. "Sepan que vamos a pelear, sepan que vamos a proponer un plan de lucha con acciones contundentes", advirtió Buzzi. Aunque dejó en claro que no lo harán solos, sino con las otras entidades que componen la mesa de enlace.
Buzzi dedicó gran parte de su extenso discurso a repasar –y defender– lo actuado antes y durante el conflicto que originó la resolución 125 de retenciones móviles.
Reservó un largo párrafo a justificar la alianza con la Sociedad Rural y dijo compartir objetivos con grupos de izquierda que supieron estar en Federación Agraria, como el Foro Nacional de Agricultura Familiar. Este sector, justamente espantado por los acuerdos con la entidad que representa a los grandes terratenientes, corrió hacia los brazos del kirchnerismo luego del 11 de marzo.
Además, un par de veces se quejó del retraso cambiario, y dijo que el gobierno nacional abandonó el perfil "productivista" del período 2002-2004 y favorece ahora al sector financiero, como pasó en los 90. También se dio el gusto de correr por izquierda a la gestión kirchnerista al señalar que "el gobierno nacional y popular es el que más deuda pagó en los últimos 50 años".
La falta de federalismo fue tema central del discurso de Buzzi –y lo es del congreso– y en ese marco le hizo el guiño a Binner. Sostuvo que se necesita una nueva ley de coparticipación que incremente los porcentajes que se destinan a las provincias y en la "enorme transferencia de recursos" que los estados del interior realizan a la Nación justificó la reforma impositiva que impulsa el gobernador.
Con Binner "nos estamos poniendo de acuerdo en el tema del inmobiliario rural", sumó y dejó así en claro que las modificaciones introducidas al proyecto del Ejecutivo –entre ellas la personalización del tributo y un techo del 300 por ciento en el aumento, pero sin revalúo de las tierras– cierra la discusión para la entidad.


El "amigo" Binner
El gobernador montó su discurso sobre las críticas a la falta de federalismo y las inequidades de las que Santa Fe es víctima. La provincia –afirmó– aporta en retenciones "el equivalente a 20 autopistas Rosario- Córdoba y no podemos terminar la mitad". Además, defendió su propuesta de diez puntos para el campo, instó a construir desde el diálogo y aseguró que su gobierno hace el "máximo esfuerzo posible" en la asistencia a los productores afectados por la sequía.


De todos modos, su presencia en el congreso, le sirvió. Es que después de cierta tensión en torno al tema reforma tributaria, que hizo que algunos productores llegaran a amenazar con realizar un tractorazo a la Casa Gris, quedó en claro que la relación con su campo goza de buena salud.


En realidad, también al campo –y a la Federación Agraria sobre todo– le viene bien mantener sólido el lazo con el gobernador. Cuando se prepara para relanzar su pelea con el gobierno nacional no son tiempos para abrir nuevos frentes.

No comments: