Si bien en su totalidad la cantidad de productos frescos que la Argentina exportó desde los puertos de San Antonio y Bahía Blanca creció, sufrieron considerables caídas las ventas externas de manzanas, peras y cebollas.
De acuerdo a un reporte de la Compañía de Información del Mercado Agrícola (AMI), la exportación de manzanas desde ese puerto sufrieron en 2012 una retracción del 36% respecto al año anterior al caer hasta las 76.800 toneladas.
El informe, citado por el sitio FreshPlaza.com, indica además que los volúmenes exportados de peras retrocedieron de las 250.000 toneladas en 2011 hasta las 204.700 toneladas el año pasado.
En tanto, los saldos exportables de cebollas cayeron un 7% hasta las 3.000 toneladas.
No obstante, el reporte de AMI, indica que la cantidad de productos frescos que partieron desde los mencionados puertos subieron un 30% respecto a 2011, hasta las 286.000 toneladas.
El informe detalla que Rusia fue el principal destino de estos productos durante el año que pasó con una receptividad del 41%. Le siguen Holanda (15%), USA (115), mientras que 3.250 toneladas partieron rumbo a Alemania, un 48% menos que 2011.
Otro reporte que avala la retracción fue el emitido en diciembre por la Cámara Argentina de Fruticultores Integrados (CAFI) que señaló que entre enero y septiembre de 2012 se exportó un 40% menos de manzanas y un 20% menos peras.
En el acumulado enero – setiembre 2012 se exportaron 115.196.428 kilogramos de manzanas, lo que representa un 42% menos que los 197.726.234 exportados en igual periodo de 2011. Las cifras del mercado de peras, en igual periodo, alcanzaron en 2012 los 356.286.006 de kilos, lo que equivale a un 18% menos que los 437.802.703 de 2011.
Desde CAFI además informan que los citados problemas de exportación, más los aumentos de los costos que superan el 20%, generaron en la industria pérdidas mayores a los US$70 millones.
Otro problema que destacan es que la industria no es formadora de precios (por el contrario es tomadora) y la caída en la rentabilidad se pone en evidencia al analizar que hace diez años se necesitaban exportar 29 cajas de frutas para pagar el salario promedio del sector, cifra que hoy llega a 70 cajas.
La industria de peras y manzanas ha invertido, según el informe, US$15 millones en la compra de plantas en todos los estratos de productores, lo que permitirá -en el corto plazo- incrementar la producción en más de 400 mil toneladas.
A su vez, la industria en general incorporó modernos sistemas sanitarios sustentables con el medio ambiente en más de 29.000 hectáreas, aumentando y modernizando la infraestructura de proceso y conservación.
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